Dado que vivimos en una época de improductividad económica, una creciente presión por la supervivencia del ser humano, el cambio de sensibilidad y de pensamiento de la gente, el comienzo de la ofensiva contra el capital corporativo a un nivel nacional y global y el continuo reagrupamiento del movimiento comunista a un nivel teórico y práctico, no es sorprendente que las características, la naturaleza y el papel del Partido Comunista de Estados Unidos en el siglo 21 sean un tema de discusión mientras avanzamos hacía nuestra 30ava Convención en Chicago.